viernes, 19 de octubre de 2012

EL HUEVO (de A. Bertran)

Me hicieron sensible, frágil, aburrido y asustadizo. Estuve preso, a oscuras, la mayor parte de mi vida. Viví encerrado y con muchos temores. Temor a caducar. Temor al exterior de mi celda y temor al interior de mi celda. El caso es que el otro día pedí ampliar, por mi propia voluntad, mi condena a cadena perpetua cuando sólo faltaban tres días y medio para finalizar mi encarcelamiento, para salir en libertad. Bueno, una libertad relativa. Antes de realizar la propuesta de quedarme me pasaron muchas cosas por mi cabeza. ¿Cuánto tiempo aguantaría sin que me comieran?, ¿qué haría un tipo como yo, tan flácido, más de diez minutos allí fuera? Seguro que me helaría y perdería la forma de mi cuerpo que aquí me he forjado. Puestos a estar por estar, dentro estaba sólo y tranquilo.  Me gusta la soledad. Pensad que allí fuera se matan por un trozo de pan y por el arroz y por el tomate.

Al día siguiente me contradije. No tardé en arrepentirme de mi decisión y, a falta de dos días para finalizar mi condena, me concedieron la libertad condicional. Salí de mi jaula y, aunque con dudas, decidí fugarme. Hice un corto recorrido por aire, tierra y mar. Un mar hirviente. Me puse caliente, muy caliente, y, contra mi propia voluntad, acabé frito y devorado por un ser escuálido que me observaba fijamente. Nunca antes había visto una mirada tan famélica. Me convertí en el protagonista que la diñaba en una película de terror de serie B. Mis temores se hicieron realidad. Débil, arrugado y digerido. Así terminé. Pero esos segundos de libertad ya no me los volverán a arrebatar. Una vez, vale, pero no más. Ahora, ese parpadeo de tiempo, ese instante en que me sentí libre, forma parte de la historia y de mi memoria, actualmente frita y defecada.



Escrito por A. Bertran en El Prat de Llobregat, octubre 2012.



                                                       Licencia Creative Commons
Este obra está bajo una Licencia Creative Commons Atribución-NoComercial-SinDerivadas 3.0 Unported.

3 comentarios:

  1. Intentaré cada viernes, escupir alguna entrada nueva en el blog. Repito, intentaré. Gracias.

    ResponderEliminar
  2. hahaha! molt bo! espero amb impaciència a que escupis la propera entrada!

    ResponderEliminar
  3. jaja mientras no sea un proposito del tipo: Cada lunes i miercoles vamos a correr! jajaj! molbe arnau!

    ResponderEliminar